Una de las etapas de los niños de mayor preocupación para los padres es el crecimiento. Hay quienes comparan la talla de su hijo con la de otros para saber si está creciendo correctamente pero, lo que muchos no saben, es que existen diferentes indicadores que nos dicen si va por buen o mal camino. ¿Quieres saber cuáles son? Adeje Salud te da todas las pistas.
El crecimiento es un largo período en el cual se desarrollan muchos cambios en nuestro cuerpo. Se considera que existe una alteración cuando hay una desviación del patrón normal y se presentan cifras inferiores a la de los niños sanos.
Aunque no existe una edad determinada para “pegar el estirón”, es cierto que se hace a un mayor ritmo a determinadas edades. Si sospechas que tu hijo puede tener problemas de crecimiento, ¡muy atento porque vamos a desvelarte algunos factores a los que debes prestar especial atención!
¿Cuándo detectar los trastornos de crecimiento?
A pesar de que cada niño tiene un ritmo de crecimiento diferente, lo normal es que los mayores picos se produzcan en las siguientes etapas:
- La infancia: durante los dos primeros años de vida hay un rápido crecimiento, dando lugar a un aumento del 25 cm el primer año y 12 cm en el segundo, aproximadamente.
- Pubertad y adolescencia: se produce el denominado “estirón puberal” con un aumento de entre 8 y 12 cm en las edades comprendidas entre 12 y 14 años.
Lo importante no es lo que mida y pese en un momento determinado, sino su evolución a lo largo del tiempo. Si observas que tu hijo no crece o deja de hacerlo de manera repentina, sobre todo en estas etapas, es necesario que acudas al pediatra para que lo controle y busque soluciones en caso de que exista alguna anomalía.
¿Cuáles son las causas de la talla baja?
Algunos de los motivos que se esconden detrás de una talla baja son: la genética, la mala alimentación, la existencia de enfermedades como la insuficiencia renal o el hipotiroidismo, patrones del sueño alterados y enfermedades graves en órganos vitales, entre otros.
Además, también puede estar causado por la existencia de otras anomalías como la acondroplasia donde el cartílago crece de forma anormal; el déficit de la hormona del crecimiento, que es la encargada de hacer que el niño crezca; el retraso del crecimiento interino y del desarrollo; el síndrome de Russell-Silver, que implica una talla deficiente; etc.
¿Se pueden superar estos problemas?
En la mayoría de los casos sí. Muchos de los factores que provocan los trastornos se pueden corregir sin necesidad de acudir a un profesional, como por ejemplo llevar una dieta equilibrada, dormir las horas necesarias o practicar ejercicio físico.
En otros casos será necesario visitar a un médico especialista que controle el crecimiento del niño. Este profesional podrá recetarle un medicación que le permita alcanzar una altura y un peso dentro de los límites que consideramos normales.
Existen diversos tratamientos en función del problema que presente el menor. Por ejemplo si existe hipotiroidismo se pueden solucionar con píldoras de reemplazo tiroideo. Asimismo, aquellos que presentan síndrome de Turner o déficit de la hormona del crecimiento, tienen a su disposición inyecciones de esta hormona que permiten aumentar su talla en 10 cm durante el primer año y que pueden aplicarse hasta que finaliza la adolescencia. Aunque no todos los niños crecen lo mismo, se puede afirmar que todos presentan mejorías con este tratamiento.
Adeje Salud, tu farmacia de referencia en Adeje, vuelve a recordarte la importancia que tiene la detección precoz para resolver algunas anomalías. Si quieres que tu hijo lleve una vida saludable, recuerda que debes controlar su crecimiento y acudir a un especialista siempre que sea necesario.